542 tubos de plexiglás iluminados uno por uno mediante 3000 leds blancos y azules dan luz a las gotas. un sofisticado software, creado específicamente para el proyecto, está programado para encender y controlar de forma alterna las luces: en cualquier momento, el operador puede modificar la programación, en una serie infinita de combinaciones. la elección de la innovadora tecnología de leds ha permitido contar con una potente y flexible fuente de luz que realiza y amplifica los aspectos formales de la intervención arquitectónica. el tipo de led elegido para el proyecto es el denominado "lambertiano", que tiene una curva de 70°, posteriormente corregida con una lente de 6°, de modo que la luz emitida se convierta en un haz casi recto, controlado, preciso y puntual, visible incluso desde muy lejos, ideal para una arquitectura como la de las gotas, que requiere haces luminosos proyectados hacia arriba: la luz es canalizada por los tubos de plexiglás, que la capturan por medio de nodos, especialmente diseñados para ello, situados en el eje vertical.