UpOGalleggio
proyecto marionanni 2003
un pequeño UpO lleva a la tierra, pero decide no aterrizar, prefiere amerizar. es un casco completamente estanco: es transparente porque no tiene nada que esconder, es más, le gusta revelar las cosas, con su luz que destella como la de la luna sobre la superficie del mar. dentro de él viven tre pequeños led alimentados con tres pilas recargables (NiMH) de más que última generación. estan en sintonía entre ellos y situados estratégicamente: uno inferior axial y los otros dos laterales radiales opuestos. sus lucecitas pueden combinarse de varias maneras: rojo-blanco, azul-blanco, azul-azul, rojo-rojo. son luciérnagas tecnológicas, se encienden y se apagan; cuando se cierra el circuito, mediante un simple toco simultáneo de los dos polos en contacto con el agua, se encienden. son criaturas especiales y sensibles: un impulso breve las enciende y apaga como un interruptor de modo que se transforman en abat-jour, lámpara de lectura, que, oh prodigio, está en movimiento, es portátil.
el contacto continuado, en cambio, hace que los led permanezcan encendidos sólo mientras se aplica esa caricia y en los 5 segundos posteriores, pasados los cuales vuelve la oscuridad. disfrutan jugando con sus colores, con sus luces, flotando en una piscina, o en una bañera llena de agua caliente, acompañando tus lecturas y, por qué no, tus paseos. pero también a ellos, agotados después de diez horas de juego, les gusta volver al refugio: una casa con sus dormitorios donde se cargan cuando quieren y duermen tranquilos mientras pasa la corriente, pero tan pronto como la corriente se va, se despiertan, encendidos. deberían dormir catorce horas para después poder volver a hacernos compañía entre los dedos o entre las olas del agua, para hacer que continúen el juego, el encanto y, como no, también la luz.
fabricado por Viabizzuno colección Alvaline